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 «Las minorías encuentran el camino de la violencia cuando están impedidas de razones y de votos”
–Felipe Calderón Hinojosa

Cuando ya se apresuran a iniciar segundo periodo del primer año legislativo entre la complejidad de empujar la transición a la democracia o reventar las funciones del congreso para apostarle a la regresión, los diputados protestados de la LXII legislatura demostraron en un día su verdadera función: actuar como verdaderos curuleros de la política.

Y luego de sentarse en la Curul esperaran y recibiran el sexto y último informe del Presidente Calderón;  y habrán de llegar las  comparecencias de los secretarios de estado, donde como siempre y para no perder la forma curulera consuetudinaria, exhibirán las malandanzas de los políticos: insultos, regaños, demostraciones de poder, negativas a las negociaciones y resentimientos de derrotas acumuladas. Al fin que ya se van y no se irán secos ni limpios, se trata de humillar al ejecutivo por la vía del poder que no acepta el debate y no de demostrar los errores en el mandato gubernamental.

El factor de ruptura legislativa le tocará a la fusión de dos grupos parlamentarios que van a ser los diputados lopezobradoristas del PT y Morena. Su tarea será la de descarriar los caminos del debate parlamentario hacia la gritería de insultos. Acusarán al Presidente Constitucional Felipe Calderón de “asesino” pero no presentaran ninguna prueba. Se escudaran, eso sí, detrás de las faldas del fuero constitucional. Así se vale todo: hasta rumiarla derrota de López Obrador el 1 de julio del 2010.

José de la Colina, en su blog en la revista Letras Libres, inventa y aplica el concepto de curuleros a los legisladores que aspiran a su curul trianual en la Cámara de Diputados. Mote y adjetivo que aplicó durante los conflictos del 2007 en la Cámara de Diputados, cuando los legisladores acudieron al verbo activo de los puños para imponer sus voluntades y cuando ocurrieron los tribunazos ordenados por López Obrador para impedir la toma de decisiones por la vía de los votos legislativos. Así nació una nueva forma de gobierno: la “curulocracia, término para designar el poder–sobre todo de blablablá– que detentan curulhabientes, curuleros y curulones”.La Cámara de Diputados ya no es un parlamento sino el territorio del curulerío, el lumpen gritón de los curuleros.

Esto lo deberán tener muy claro los tres legisladores sudcalifornianos que irán a San Lázaro, los tres del PAN y los tres deberán sortear diversos criterios y tesis en el entendido que si un parlamento es el espacio para legislar –es decir: diseñar las leyes y vigilar al ejecutivo–, los legisladores perredistas y lopezobradoristas convertirán el Palacio Legislativo en una Cámara de torturas. Los curuleros sí tendrán todo el desparpajo para insultar a sus invitados –aún a pesar de la invitación obligatoria– pero buscando la respuesta y entonces vendría la hipocresía de quien pudiera sentirse insultado en su casa.

Pero mas allá de posturas de los curuleros, lo malo de todo es que el país no pasará de un sistema presidencialista dominante a un sistema político con equilibrio de poderes, sino a uno de revanchismo. El legislativo tiene la función de vigilar al ejecutivo pero no para suplantarlo y diseñar una política presupuestal responsable y con sentido humanista y social. O como pretenderán los nuevos Diputados ex priistas de colmillon y lopez-obradoristas del PT y Morena: pedir renunciar a cuanto secretario de estado se les atraviese, incluyendo el no reconocimiento constitucional del próximo ejecutivo Enrique Peña Nieto. ¿Cómo reaccionarían esos nuevos diputados o la propia Cámara si alguno de los secretarios o el propio EPN se le ocurre pedir la renuncia de uno de esos curuleros? La gritería va a ser escandalosa. Pero el legislativo sí puede impunemente invadir el espacio constitucional del ejecutivo.

No importan ya las biografías. Por ejemplo en la legislatura que gracias a dios ya se fue, Porfirio Muñoz Ledo, no puede quitarse de su currículum su papel como asesor político de Díaz Ordaz durante la matanza de estudiantes de Tlatelolco en octubre de 1968 o como subsecretario de la presidencia durante la represión de halcones el 10 de junio de 1971 con Echeverría. Muñoz Ledo felicitó y apoyó a Díaz Ordaz con dos discursos en 1969 y guardó silencio cómplice durante el sangriento jueves de Corpus. ¿Por qué entonces no pidió las renuncias de Díaz Ordaz y Echeverría? Porque militaba en el PRI. Y por complicidad.

Paradójicamente la misión de los nuevos curuleros de la izquierda, no será buscar la transición a la democracia desde el legislativo, sino que su tarea será la de impedir la gobernabilidad a gritos y sombrerazos. Se tratará de bloquear acuerdos, de tomar tribunas o de reventar comparecencias. Para eso justamente fueron enviados por López Obrador. Si Enrique Peña Nieto ganó la presidencia y es el presidente legítimo y constitucional, entonces los escuderos del tabasqueño van a convertirse en reventadores de la gobernabilidad. Su objetivo será, simple y llanamente, de porros del lopezobradorismo.

Basta que un diputado lopezobradorista se aposte en la banqueta de Los Pinos para provocar la violencia y luego llevar el asunto al curulerío legislativo. La gritería como substituto de las razones políticas. Los insultos en lugar de las ideas. Para eso iran a la Cámara. Para reventar las posibilidades de la transición democrática.

Van a ser tres años legislativos tortuosos. Ya el PRD y el PT anunciaron tribunazos desde su minoría para impedir el paquete presupuestal del 2013. Y con un PRI legislativo pasmado y un PRD violento, el espacio va a ser ocupado por el PAN. Así que el Palacio Legislativo inauguró el régimen curulmentario de la República de Curuleros.

PARLAMENTOS
Carlos Corona, Delegado de SEDESOL en la entidad atento a los grupos sociales desprotegidos, trabajando de la mano de la razón, los acuerdos y en equipo con el Gobernador Marcos Covarrubias…los que andas preocupados son los del PVEM en el Cabildo de La Paz, traen un desorden en la nómina fantasma de asesores, pero eso si el cheque si sale completito de tesorería mientras que los asesores fantasmas ni sus luces…todo esto se cree que es en beneficio a su obediencia de Esthela Ponce, quien está muy atenta para señalar los errores del Gobierno del Estado, pero en su cabildo danzan los aviadores al son de la complacencia de la Tesorería, se dice que hay una docena de cheques “light” cada quincena producto de los “asesores” de los señores regidores… lo peor del caso que el producto de esos cheques ni siquiera se queda en el municipio ni la entidad, ya que se sabe que un yerno de una regidora, que a la postre es integrante del CEN de cierto partido político es a quien llega ese dinerito “charro” por allá en la Capirucha del país…así las cosas, nada diferente a los “curuleros” de San Lázaro, y mientras no hay dinero para proveedores ni la nomina, los chicos del verde ni se preocupan, ¿como la ven?… recibo sus comentarios en bcsmonitoreo@gmail.com