En la Opinión de Alfredo González


  • Oscar Leggs, gobierno humanista e incluyente
  • Victor Castro Cosio. No se puede gobernar a un pueblo dividido.
  • Respeto reciproco entre prensa y gobierno.
  • La paja en el ojo ajeno

Leímos en una ultima hora en un titular que nos dio la primera impresión de este jueves. Manifestada por el edil virtual de Los Cabos el maestro Oscar Leggs: un gobierno humanista e incluyente. Nos hace inferir que ejercer la dinámica de dos operaciones de las cuatro fundamentales es básico para avanzar en la obra social y económica: sumar y multiplicar. No se vale ni restar ni dividir. Lo que pudiéramos llamar el ABC de la ciencia política, porque debe haber elementos con experiencia valiosa o jóvenes con ganas de participar. Buena inclusión del maestro a quien no tengo el gusto de conocer personalmente.

Por su parte hace algunos días es válido ratificar aquí lo manifestado por el relevo de Carlos Mendoza Davis, el maestro Víctor Castro Cosío en el sentido que no existe ningún problema en cuanto a las relaciones entre prensa y función pública, claro está, con el respeto reciproco que ambos se profesen. Gobernante electo dijo que el nunca se ha referido a personas con un lenguaje que ofenda y que si en esos términos se dan las relaciones, entrevista, radio prensa,etc. No tendrá inconveniente de aceptar opiniones criticas y analíticas. Muy clara la posición del gobernante electo. Recordemos que lo cortes no quita lo valiente. La verdad no requiere de maquillajes ni tiramos para hacerse valer y mucho menos para tratar de presionar bajo la amenaza de la ofensa.

Cuando Platón escribió su obra “la republica” aspiro al estado perfecto. Después Aristóteles haría unas recomendaciones. El caso es que, en estos lances de la política, hasta en la Biblia se encuentran unos pasajes como aquel que cuando juro amistad Simón Pedro a Jesus escucho estas palabras: “antes de que cante el gallo me habrás de negar tres veces”. La noche de la aprehensión de Cristo Jesus alguien reconoció a Pedro como uno de sus seguidores y fue cuando dijo: yo no lo conozco, yo no lo conozco, yo no lo conozco. En ese momento el gallo canto como se lo habían dicho. Aun así, conociendo la debilidad humana se le concedió el merito de continuar la labor del catecismo del hombre mas sublime que haya tenido la humanidad. Hoy vemos que en algunas platicas de donde se filtran informaciones no falta quienes le echan candela a este o a aquel servidor publico o al menos insinúan para conocer el pensamiento del gobernante virtual y aun cuando se sabe de buena fuente que no hubo ningún comentario de parte de Castro Cosío, solo queda el hecho de perjudicar. Ahora bien, Carlos Mendoza Davis fue el cuarto gobernador mejor evaluado en el país, un gobierno se compone de muchos eslabones y engranajes. Es como un reloj que puede fallar si una de esas piezas no está debidamente en su lugar. Sin embargo, parece ser que no es una idea mas que de hacer daño donde por angas o por mangas se busca la forma de protagonizar y a veces asumir acciones bucólicas que el mismo gobernante electo rechaza.

Todos aspiramos a un trozo de la costilla, pero todos somos lo suficientemente maduros para no perjudicar a terceros para beneficiarnos. Por nuestra parte si hemos dicho que no somos los que van a imponerle los nombramientos a Castro Cosío. Podemos opinar, pero es su responsabilidad el que lo hagan bien o que lo hagan mal, que sean capaces o incapaces. Donde si podemos opinar en forma analítica es cuando gentes que han hecho daño anden todavía raspando los escombros que dejaron y el olor a azufre. Alguien de esos mismos ha dicho: ¿los latrocinios de Cota Montaño o Agundes Montaño? Yo creo que no. Pero nadie se acordará de eso si no representaran un retroceso para una administración que esta a punto de despegar y como dice el dicho con el respeto correspondiente: mastín que come huevo aunque le quemen el hocico.

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